En el mundo frenético del marketing digital, donde todo vale por unos segundos de atención, hay una pregunta que cada vez suena más fuerte entre creativos, agencias e influencers: ¿vale todo para volverse viral?
💥 Spoiler: no.
El caso Elena Gortari y Garnier: una lección de lo que no hay que hacer

Hace unos días, la influencer española Elena Gortari se volvió viral en TikTok. Pero no por lo que imaginás. Publicó un video en el que simulaba estar siendo acosada en la calle. Parecía súper angustiada… hasta que, de golpe, el video cambiaba de tono: ¡todo era una actuación para mostrar cómo le había quedado el pelo tras usar productos de Garnier! Sí, literal.
Lo que parecía ser un mensaje de concientización terminó siendo una promo encubierta. La reacción en redes fue inmediata y feroz: miles de usuarios acusaron a Gortari y a la marca de banalizar una problemática social gravísima como el acoso callejero, todo en nombre de unos likes y una melena con brillo.
¿Inocentes o cómplices?

Ante el escándalo, Garnier salió a despegarse del contenido con un comunicado oficial:
“Este contenido no refleja nuestros valores como marca. Condenamos firmemente la trivialización de una situación tan seria como el acoso.”
La empresa no aclaró si había aprobado previamente el guión del video, pero su rápido alejamiento deja entrever algo: el contenido probablemente no fue aprobado con el debido control, y eso hoy es un lujo que ninguna marca se puede permitir.
¿Y las ventas? ¿Puede esto afectar a la marca?
Cuando una marca global como Garnier queda en el centro de una polémica, lo primero que muchos se preguntan es: ¿va a perder ventas por esto?
La respuesta corta es: depende.
Garnier es parte del gigante L’Oréal, una marca con años de posicionamiento, fuerte presencia en puntos de venta y campañas masivas de branding. No va a desaparecer por un video desafortunado.
Pero el daño no siempre es inmediato ni visible en los números del mes siguiente.
1. Daño en la percepción de marca
Puede que el producto siga vendiendo… pero la gente ya no lo asocia con algo positivo. El vínculo emocional se daña, y eso a largo plazo afecta la fidelidad.
2. Rechazo social
Aunque la marca se haya despegado oficialmente, parte del público la responsabiliza igual.
En el mundo actual, donde el consumidor valora marcas con propósito y coherencia, estas crisis dejan cicatrices.
3. Boicots digitales
Las campañas de “cancelación” pueden no mover la aguja del todo en un mercado masivo, pero sí pueden volverse tendencia y afectar el posicionamiento online de la marca (reseñas negativas, comentarios en redes, caída en reputación digital, etc).
4. Cambios de preferencia
Cuando el consumidor tiene mil opciones para elegir un shampoo, a veces una polémica mínima es lo que lo empuja a cambiar de marca sin mirar atrás.
¿Qué nos enseña todo esto?🤔
Que la creatividad sin brújula ética es una bomba de tiempo.
Una campaña puede tener la idea más disruptiva del mundo, pero si no se considera el contexto, el impacto emocional y el respeto por temas sensibles, puede volverse en contra en cuestión de minutos.

Entonces, ¿cuáles son los límites?
En marketing buscamos conectar, emocionar, impactar. Pero hay líneas que no deberían cruzarse:
⛔ No usar temáticas como violencia, acoso o salud mental como excusa comercial.
⛔ No disfrazar de contenido social lo que claramente es una publicidad.
⛔ No apelar al “shock” si el mensaje no tiene fondo.
Tips para no comerse un escándalo digital
⚡Chequeo ético antes de publicar: ¿esto puede ofender o banalizar?
⚡Supervisión real de parte de las marcas. No todo influencer sabe lo que hace.
⚡Feedback post-publicación: escuchá a tu comunidad, y si te equivocaste, pedí disculpas.
Conclusión: ¿por qué querés ser viral?
Sí, esta campaña se volvió viral. Elena Gortari estuvo en boca de todos. Garnier también.
Pero no por el pelo brillante ni por una rutina capilar revolucionaria. Fueron tendencia por las razones equivocadas.
Y ahí es donde nos toca frenar y pensar.
👉 ¿Para qué querés ser viral?
👉 ¿Qué tipo de conversación querés generar?
👉 ¿Querés sumar awareness… o que la gente asocie tu marca con una falta de sensibilidad total?
Porque no todo lo que explota en redes vale la pena. Ser viral no es sinónimo de éxito. A veces, es sinónimo de crisis. Y la reputación no se construye con trending topics, sino con coherencia, respeto y propósito.Así que la próxima vez que estés craneando una campaña para “romperla”… preguntate esto: ¿estoy buscando conectar o simplemente hacer ruido?
¿Y vos, qué opinás al respecto? 👀